Como un clamor de libertad
Deseo la mejor suerte a estos muchachos y los recomiendo encarecidamente a todos los liberales.
Numquam ponenda est pluralitas sine necessitate
Un juzgado de Sabadell ha condenado a un joven a pagar 180 euros o 15 días de arresto por gritar "en tono despreciativo y vejatorio", según dicta la sentencia (PDF), la expresión 'Viva la Guardia Civil' a cuatro Mossos d'Esquadra en una zona de discotecas de la ciudad vallesana el pasado mes de marzo.Más aquí.
Ecuador quiere dejar el petróleo en tierra en el mayor yacimiento del país, en el Parque Natural Yasuní, 'para proteger la vida y nuestra verdadera riqueza, que es la naturaleza', según dijo hoy el ministro de Energía, Alberto Acosta.
The 10-month-old, whose given name is Howard David Ludwig, was issued a firearm owner's identification card after his father, Howard Ludwig, paid the $5 fee and filled out the application (...) Ludwig, 30, of Chicago, applied for the card after his own father bought Bubba a 12-gauge Beretta shotgun as a gift. The weapon will probably be kept at Ludwig's father's house until the boy is at least 14.De todas maneras, es necesario precisar que en una sociedad realmente libre donde estos permisos no fueran necesarios esta clase de actos de exhibición-propugnación del derecho a la libertad en la posesión y uso de las armas no serían necesarios. Todo procedería de forma más natural y el muchacho no haría uso del arma hasta el momento determinado por la responsabilidad de los padres, quienes en este caso tiene la patria potestad y los derechos naturales sobre la formación del niño. En suma: acciones excéntricas como la de la familia de Bubba no serían necesarias en un entorno social e intelectual donde la familia instruyera al joven en el conocimiento de sus libertades y el derecho a hacer uso de ellas.
El gurú financiero Robert Kiyosaki suele comentar socarronamente sobre esas personas que siguen los consejos financieros de amiguetes y familiares: “a quién le vas a hacer caso acerca de cómo manejar tu dinero, ¿a alguien que va por el mundo en Ferrari o a alguien que usa el metro?” En estas cuestiones de base radica la diferencia entre el que invierte en acciones de Microsoft y el que pone su dinero en las estampitas de Afinsa, pero la analogía no termina aquí.
La progresía anda histérica con el tema de las declaraciones de Ecclestone. Han puesto el grito en el cielo, hablando de un supuesto chantaje, de que a los valencianos se les trata de idiotas, etc. etc. No sé si serán idiotas: lo que sí sé es que viven en una comunidad que crece y prospera desde hace años, todo un mundo de diferencia con los entornos esclerotizados económica e intelectualmente de La Mancha, Extremadura y Andalucía.
La santa indignación progresista da tanta más risa cuando se advierte que apenas esconde el furor totalitario y antidemocrático que toda izquierda supura. Porque en el fondo en esto consiste el handicap mental del progresismo: la falta de comprensión total de los principios que dicen defender. Existe en las democracias más avanzadas del planeta el concepto del endorsement (vagamente traducible al español por “apoyo” o “patrocinio”), por el cual una persona o entidad con un cierto grado de carisma o autoridad se manifiesta públicamente a favor de un candidato. Esta persona o entidad puede ser un empresario, un artista, un medio de comunicación, un participante retirado de la liza electoral.
De hecho, el PSOE mantiene en sus medios afines (el 90% de la nación) día sí y día también, a su ejército de chupatintas, saltimbanquis y titiriteros expectorando animaladas. Pero, ¡ah! que nadie los toque, que son artistas, la gente que nos permite soñar, conciencia del pueblo, azote del poder. En cambio, si se trata de un caballero con la capacidad de aportar riqueza a una región quien expresa su opinión sobre el candidato que le parece más solvente, corramos a callarle la boca, porque está intentando chantajear al pueblo.
En el fondo, las declaraciones de Ecclestone no hacen sino confirmar la diáfana verdad de que las decisiones más graves son también las más simples. Así que, para volver a mi pregunta inicial, ¿a quién van a seguir? ¿A quiénes se codean con los más poderosos? ¿O a los que les ríen las gracietas a momias antillanas y a indiecitos cocaleros con jersey de lana gorda? Uds. deciden.