Lo que sigue son tres estampas recogidas en estos meses en los EE.UU.
1. Quien viva en el Sur de California queda bendecido por el uso permanente del coche. El transporte público pagado ("subvencionado") por el estado apenas existe y los ciudadanos gozan de un sistema amplio de autopistas y de una gasolina sin el atraco a mano armada que tiene lugar en Europa cada vez que se llena el depósito. Basta girar la llave de contacto para sentirse humillado por la opresión estatal todas las mañanas, pero las masas aborregadas por el consenso socialdemócrata que nos deshumaniza ni lo huelen.
La otra noche, cenando en un restaurante mexicano con un compañero de trabajo bien majo a pesar de ser progre y vegano (y que, a pesar de esto último, adora los restaurantes mexicanos por las margaritas bien cargadas de tequila y los frijoles... no sé cómo su mujer le aguanta cuando se le mete en la cama después de semejante combinación) me echaba la bronca cuando le contaba que una rubia casi me embiste por detrás al cambiarme de carril. Lo que yo esperaba que sería punto de partida para echarse unas risas se convirtió en toda una perorata sobre cómo, en un atasco o en una autopista de tráfico denso tales cambios de carril, injustificados según él, perjudican a todos, ya que por más que el conductor individual pueda ganar alguna ventaja, el colectivo de aquéllos que circulan solamente se ve perjudicado por la acumulación de cambios de carril, reducciones de velocidad de los coches que circulan por el carril "invadido", el tiempo perdido por el propio conductor que se prepara para esa "invasión", etc, etc, etc. Toda perorata, sin la menor evidencia científica, solamente basada en dogmáticas invocaciones al sentido común y "tiene que", "debe de", "sin duda", "con seguridad", toda esta perorata absurda (pero muy sentida) iba derramándose de sus labios entre ingestiones de alcohol y de frijoles. Y no pude menos que pensar que esta boba nimiedad revelaba de qué manera, de forma continua, el progrerío no es en realidad una ideología política basada en premisas racionales, sino en una mera actitud vital, una que combina la cobardía propia ante la vida con la aprensión a que los demás puedan hacer con la suya. En el fondo, la progresía no es más que una ridícula infección de pusilanimidad y envidia, que se manifiesta en la construcción de un hipotético principio de bien colectivo sin base en la tierra, tan ficticio y apócrifo como the flying spaghetti monster, y que se conjura para llenar de una lamentable seguridad a inviduos ridículos en su moralina, individuos que con sus muñones buscan cortarles las piernas a los demás.
Mientras, conduciendo en Montana tuve la suerte de ver esto:
Por si no se ve bien, el límite de velocidad diurno es lo que se considere "razonable y prudente". Si razonable y prudente en una recta inacabable con perfecta visibilidad es, como yo mismo consideré, 130mph,
so be it. Nada de falacias sobre beneficios colectivos intangibles, nada de limitarle el uso de la razón y la responsabilidad al individuo. Lugar bellísimo, Montana, y no solamente por la libertad que uno allí puede respirar.
PD. No saben cómo lamento que
María abandone Red Liberal. Las últimas semanas han sido muy turbias y espero encontrar el tiempo para escribir lo que pienso. Sin ponerme de parte o en contra de nadie, simplemente me gustaría adelantar que en estos momentos de crisis, con la que nos espera hasta 2012, la disensión que se observa en Red Liberal duele. Mucho.
7 Comments:
Gracias por ofrecernos estas estampas americanas. Espero que sigas poniendo más. La que más me gustó la del límite de velocidad :)
Blog para el Oso de Dakota en RL, ya!
Te vuelvo a decir lo que ya te dije hace meses. Te fijas en los detalles sin importancia y dejas los gordos. Eso del límite de velocidad es una curiosidad con cero importancia.
Sin embargo, que el gobierno de los USA se gaste millones de dólares de los contribuyentes para evitar que un banco privado vaya a la bancarrota, eso si es importante y ni lo nombras. En comparación con ese abuso, lo de poner el límite de velocidad aqui o allá es el chocolate del loro.
Pero si quesitos no ha salido de la M-30...
Tengo proyectado escribir un libro sobre las carencias pedagógicas inherentes a los sistemas de educación pública, basado en mis experiencias
Si el libro está basado en tu experiencia estudiando en un sistema con carencias pedagógicas ¿significa eso que lo vas a escribir con faltas de ortografía?
Tienes un meme.
http://palencialiberal.blogspot.com/2008/04/meme-debido.html
Y tan americanas. Pásate por mi blog.
Un saludo
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